tú eres tonto, muchacho, tú eres tonto, y en tu casa lo tienen que saber
16v102009
__________________________________________________
Me palpo las ubres metafísicas
hasta que consigo atraparles la tetilla,
agarro con fuerza y la espachurro
para extraerle el néctar de las musas;
pero nada, apenas dos gotas,
la palabra vida, el adjetivo suave.
Y no sé bien aún si es porque estoy seco,
o porque nunca he sabido bien cómo ordeñarme.
(—¿Qué ha querido decir, Sú?
—Que se está poniendo como una vaca, Án)
1 han querido poner más luz en esta calle
Vida y suave.
No es poco ordeñar para unas ubres aparentemente secas.
Quizás por que no lo estén.
Un abrazo.
Publicar un comentario
<< Cuando estés perdido, vuelve al principio -Vizinni-